02 septiembre 2011

LA LLEGADA DE LOS PESCADORES

Descargar pescado en el puerto. Cientos de vidas anónimas descargando parte de las mismas. Mientras les observaba, me di cuenta de que estaba pensando en la vida de otras personas y no en la mía propia. Igual, esas personas a las que vemos como simples máquinas de trabajo y a las que la costumbre hace que formen parte del puerto, como un barco o una red más, tengan pensamientos muy parecidos a los míos, a los nuestros.
Me gusta pensarlos como personas individuales y no como colectivo. ¿Qué habrá detrás de cada rostro? ¿Océanos de amor? ¿ Mares de olvido? Todos navegamos por las mismas aguas y tarde o temprano vamos a parar al mismo sitio. Por una vez, deberíamos mirar más allá de nuestra cubierta y pararnos a observar el horizonte...